Renunciando a nosotros mismos
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Hace un par de semanas me di cuenta que dos hombres que conozco, quienes son reconocidos por ser ampliamente promiscuos (y aclaro que fue la forma más amena de ponerlo) decidieron embarcarse en una relación, ambos son personas muy jóvenes uno de ellos, Diego tiene 26 años, estudiante, el otro, Hernán tiene 20 empleado de una empresa, ellos son reconocidos por haber tenido una vida sexual públicamente activa, en donde nunca han ocultado sus amores de una noche, sus idas a saunas y videos y en general su disfrute pleno de lo que como gay encontramos interesante sexualmente hablando, antes de herir susceptibilidades, aclaro que no todos los gais encuentran divertido ir a un sauna, o rematar una noche de rumba con un hombre en sus brazos, pero digamos que ocurre con frecuencia y no se puede negar.
Volviendo al tema de este par de conocidos, Diego y Hernán decidieron ser novios, de entrada me pareció un poco curioso porque ambos siempre me han hablado de nunca querer compromisos, de preferir disfrutar la vida comiendo a la carta y enfocándose en ellos mismos, así que fue muy sorpresivo cuando supe que estaban saliendo, en pareja monógama, ya que nunca pensé que fueran a buscar un compromiso tan temprano en sus vidas, y que justamente lo hicieran entre ellos dos.
Continuando con su progreso, cerca de un mes después de su noviazgo, recibí dos invitaciones de amigo en Facebook, yo acalorado pensé que me habían eliminado de sus perfiles anteriores, y la respuesta unánime fue que decidieron crear una vida digital nueva, buscando dejar atrás el pasado y cierta cantidad de amigos, que según el otro “eran dañinos para la relación”, eso también me pareció curioso porque un nuevo perfil en facebook no elimina automáticamente el pasado.
Fue ahí cuando me di cuenta de lo que trataban de hacer, están buscando la fidelidad limitando los medios del otro de ser infiel, eliminando contacto con su pasado, poco después de las invitaciones de amigo, me escribieron al Whatsapp diciéndome que estaban estrenando numero, de nuevo, otro intento por encauzar una fidelidad que parece postiza, puesta, obligatoria.
¿Por qué los homosexuales consideramos que la fidelidad es un interruptor?
¿Acaso se enciende automáticamente cuando uno dice el sí que inicia el noviazgo formalmente?
Creo que la posibilidad de éxito en una relación, midiendo el éxito como fidelidad absoluta en este caso, es más alto porque ambos habiendo sido hombres tan promiscuos han decidido dejar ese mundo atrás y tratar de crear una relación basada en la monogamia y el respeto mutuo, pero también es claro que las limitantes en redes sociales que les conté fueron impuestas por Hernán y aceptadas por Diego, más que un compromiso voluntario de éste.
Considero que si el compromiso es sincero y voluntario habría sido innecesario el revolcón en Facebook y Whatsapp, cuando uno quiere ser infiel busca la manera, se crean perfiles nuevos, o se guardan contactos con otro nombre que no genere sospecha, o simplemente se abre Grindr en un momento en que se pueda buscar fácilmente una relación sexual que dure 15 minutos, el limitante es mental y no físico, y así como se busca la manera de ser infiel, maneras que necesitan un poco de creatividad, es mucho más fácil ser fiel, con una frase como “ahora tengo una relación estable y no me interesa” se quitan del camino a cualquier persona que los busque con interés sexual, no es tan difícil como muchos pudieran creer.
Aplaudo y respeto el interés de Hernán por crear un ambiente en donde sea más probable la fidelidad, pero contando con que él trabaja en horario de oficina y Diego solo mediodía pues ese tiempo libre permitiría que se quebrante el compromiso, por eso me parece respetable pero infructuoso, mas cuando en confidencia Diego me ha contado en par de ocasiones que esta que manda todo al carajo y regresa a su vida de soltero, esa vida que dice extrañar, esa libertad que se asoma al horizonte como el tesoro al final del arcoíris.
¿Sera que es tanto el desespero por sentirnos acompañados que permitimos negar lo que somos, nuestros deseos y aspiraciones sólo por estar en una relación “estable”?